Inteligencia artificial generativa en la Administración Pública y el Derecho a una buena administración
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Resumen
Las tecnologías digitales han revolucionado nuestra vida, pero la Inteligencia Artificial (IA) ha sido especialmente disruptiva. La IA, en particular la generativa, ha generado debates en múltiples áreas, desde la ética hasta el derecho o la economía. En el sector público, la IA puede mejorar la eficiencia en su actuación, pero su uso debe garantizar los derechos fundamentales, pues es necesario que la IA sea fiable, confiable y respetuosa con la dignidad humana. La implementación de la IA ha de estar acompañada de una supervisión humana adecuada y de regulaciones que protejan los derechos fundamentales sin frenar el desarrollo tecnológico. El derecho fundamental a una buena administración en sentido amplio es un elemento imprescindible para que la IA utilizada por la Administración Pública sirva a los intereses generales en respeto de los derechos y libertades individuales de la ciudadanía.